lunes, 30 de marzo de 2009

CAPITULO 10


Nuche Varela Vania Lucero.
Geopolítica y Comunicación.
31 de marzo de 2009.
“IDENTIDADES NACIONALES Y MUNDIALES Y EL SISTEMA INTERESTATAL”.
Las diversas corrientes político-culturales de la economía mundial capitalista actual han surgido precisamente de la mano de la evolución del propio sistema. Esencialmente, son definidas como las expresiones de las restricciones culturales impuestas por la forma que ha tomado el proceso de acumulación del capital.
Estas corrientes se originan a partir de las contradicciones de los sistemas, donde existen múltiples y muy variados estados delimitados por una única división del trabajo.
Cabe resaltar la relevancia del proceso de conversión del Estado (iniciativa nacida en Europa durante el siglo XVI) para la estructuración del sistema mundial moderno, puesto que se perseguía la transformación de la nación-Estado en el modelo político general, así como la extensión global del sistema interestatal.
De ahí que la mayor parte de las actividades políticas –si no es que todas- concentren su atención en la nación-Estado. Estos Estados se han caracterizado a lo largo de la historia por su constante interferencia en el quehacer del mercado mundial, actuando “… como aparatos centralizados de dominación de la mano de obra al servicio de la producción capitalista”
[1].
No obstante, parece ser que los mismos Estados se complican las cosas, ya que su propia existencia dentro del sistema interestatal, establece algunas limitaciones causantes a su vez de la restricción de la libertad estatal, es decir, ningún Estado cuenta con libertad absoluta para manejar las relaciones interestatales a su antojo.
De este modo hacen su aparición las llamadas fuerzas antisistémicas, quienes han luchado por propagar su efectividad, tratando vehementemente de intervenir en la conducción de los procesos de acumulación de capital mundial; además de su incesante intento de pasar el nivel estatal y llegar al supranacional o global.
Dentro del sistema interestatal encontramos dos tipos de Estados: aquellos cuya concentración de actividades es central y en virtud de ello se consideran más poderosos, por otro lado, emergen los Estados débiles, estos son, las zonas limitadas a la realización de actividades periféricas.
Esta cuestión dio pie a la definición de tendencias fundadas en los términos del “equilibrio de poder”, donde se hace referencia a las relaciones de competencia entre Estados centrales, asimismo, establece su sometimiento a políticas donde se procura la no supremacía de algún Estado sobre los demás; y el “imperio”, el cual reúne políticas imperialistas que se expresan como mecanismos dirigidos a la supeditación política de los países periféricos a los Estados centrales.
Con estas afirmaciones, se entiende que el nacionalismo y el internacionalismo surjan no sólo como simples expresiones ideológicas imprecisas, sino que simbolizan diversas tendencias político-ideológicas “… dotadas de un componente de clase variable que se deriva de los esfuerzos continuados por parte del capital y la clase obrera…”
[2]. Esto como una respuesta a las circunstancias estructurales generadas por la producción capitalista.

BIBLIOGRAFÍA:
· WALLERSTEIN, Immanuel. Geopolítica y Geocultura. 1ra. Edición, Barcelona, Editorial Kairós, 2007. 336 PP.
[1] Immanuel Wallerstein. Geopolítica y Geocultura. Ensayos sobre el moderno sistema mundial. Pág. 194.
[2] Ibídem, pág. 199.

domingo, 29 de marzo de 2009


López Rodríguez Yuliana IvetteReporte de lectura
24-Marzo-2009

LA ECONOMIÍA MUNDIAL CAPITALISTA:
PERSPECTIVAS A MEDIO PLAZO


La economía capitalista en un lapso de un siglo desaparecerá, así expresa Immanuel Wallerstein en su publicación Geopolítica y Geocultura en el capitulo 9, éste empieza dando un contexto del año 1945, representaciones a corto plazo y finaliza con una perspectiva del futuro.

El sistema mundial, (1945-1988)
Durante este tiempo hubo un esparcimiento económico capitalista.
La fase A de Kondratieff clásico: Tiempo de monopolio la ventaja era elevada y la distribución social y desigual era desequilibrada, pero culminó porque el mercado mundial hizo su aparición con contrincantes económicos.
La fase B de Kondratieff estándar: En éste el desempleo se presenta en el mundo, pues es exclusivo. Éste punto sigue vigente.

Los puntos anteriores son objetivos y perjudiciales “sobre todo en relación con el porcentaje global de beneficio que traen consigo, y, por consiguiente, con la acumulación de capital en la economía mundial en su conjunto”
[1], las ventajas o desventajas del periodo dependen del grupo social en particular. Llegando a una generalidad el periodo A es más satisfactorio que el B.

Estados unidos en las economías interesantes se adjudicó una superioridad política y militar por ello fue un líder cultural, en la fase A su funcionamiento es eliminado. A finales de los 60´s, sus aliados se convirtieron en sus rivales económicos, en 1945 nace como fuerza política el tercer mundo con las guerras de Argelia y Vietnam y la revolución mundial del 68, con esta última se causo una levantamiento contra el poderío estadounidense y los movimientos socialistas y nacionalistas.
Así en 1968 la cultura estadounidense fue cuestionada.

El sistema mundial de 1968 aproximadamente 2000
La caída del poderío estadounidense estabilizo el sistema originando una desconcierto científico porque se cambian “las instituciones sometidas a dicho ataque, cuando menos a corto plazo”
[2].
Ésto provocó:

El enfoque en Nizón-.Ford-Carter que residió en acoger posturas políticas exteriores.
En los años de 1945 a 1967, los “movimientos decimonónicos” se forjaron con el liderazgo del estado, entre ellos esta los sociodemócratas y los comunistas en la revolución de 1968 aparecieron movimientos de las “minorías” que trataban de trasformar la sociedad y tener libertad de expresión.
Durante el siglo XIX se quiere conocer a la sociedad cambiante para controlar los cambios, unos decían que para conocerla era necesario observarla por pedazos y se dividió en dos:
1.- VERSION IDEOGRAFICA: En el acerbo de datos.
2.- VERSION NOMOTETICA: Se analizaron los datos de la anterior y se ordeno en estadísticas y de ahí se hacían leyes universales del comportamiento humano.
En este mismo levantamiento hubo una marca en los movimientos antisistémicos y entre los intelectuales de las ciencias sociales.

El medio plazo “2000-2050”: los vectores posibles
El autor propone cuatro:

PRIMERO: Aumentará el potencial de la economía mundial capitalista que sostendrá las industrias más sobresalientes del universo para ello habrá:
a) un beneficio total a nivel mundial de toda la productividad. Se basa en la economía.
b) La producción en congruencia debe de estar monopolizada para que el beneficio se disemine a nivel mundial, mediante acuerdos políticos.

Si la asociación Japón-Estados Unidos toma el frente tecnológico este vector tendría éxito, la economía sería más extensa y célebre.

Y Europa Occidental no tendría ningún papel en este ámbito.

SEGUNDO: “Gran ofensiva Europea hacia el proteccionismo”
[3], quien tomaría la delantera en la siguiente expansión se adueñará de la tecnología.

TERCERO: El esparcimiento de la economía necesitaría al Tercer Mundo para la producción así habrá un malestar masivo.

CUARTO: Las ciencias sociales y las corrientes filosóficas, se debe encontrar un equilibrio entre las ideas estáticas y emergentes y si las ciencias sociales logran alcanzar un asenso de sus intelectuales al poder se reorganizará un sistema crítico.

Si se hacen los cuatro vectores habrá una expansión económica liberada por Europa Occidental basada en la producción de Japón-EUA y:

1.- Hubiera una lucha por la hegemonía en donde Japón (EUA) Y Europa Occidental (URSS), en 2050 se desate una guerra nuclear.

2.- Existe un miedo por el desastre mundial y por ello se cambié el sistema por otro con más desigualdad.

3.- El sistema actual se caerá, de manera confusa con gran inseguridad que caería en un caos, pero después se ordenaría en uno con igualdad y democracia.

Wallerstein, concluye que la lucha de los movimientos contra el sistema y el de las ciencias sociales deben de arreglarse por separado aunque tengan relación.

Nadie sabe el sino y menos de nuestro complejo sistema mundial, pero es posible estudiarlo y deducir, sin embargo el comportamiento humano es impredecible.



BIBLIOGRAFÍA:
Immanuel Wallerstein, Geopolitica y Geocultura. Ensayos sobre el moderno sistema mundial., Kairós, Barcelona, 2007. Pág. 171-189.

[1] Immanuel Wallerstein, Geopolitica y Geocultura. Ensayos sobre el moderno sistema mundial., Kairós, Barcelona, 2007. Pág. 173
[2] Immanuel Wallerstein, Geopolitica y Geocultura. Ensayos sobre el moderno sistema mundial., Kairós, Barcelona, 2007. Pág. 175
[3] Immanuel Wallerstein, Geopolitica y Geocultura. Ensayos sobre el moderno sistema mundial., Kairós, Barcelona, 2007. Pág. 183

López Rodríguez Yuliana Ivette
Geopolítica y Comunicación
Reporte de Lectura

CAPITULO 8

TIPOLOGÍA DE CRISIS DEL SISTEMA MUNDIAL

El termino CRISIS puede tener diferentes acepciones, el término común se utiliza para la caída de todo sistema, pero con exactitud se refiere “A una circunstancia rara, la circunstancia en que un sistema histórico ha evolucionado hasta el punto en que el efecto acumulativo de sus contradicciones internas impide que el sistema resuelva sus propios dilemas por medio de ajustes en sus patrones institucionales vigentes”
[1], así la crisis, se da en un contexto donde es evidente la separación del sistema dominante, en este punto es conveniente decir que hay enfrentamientos. Dentro de la crisis hay 6 condicionales:

1) Proceso de división social organizado a través de los modos de producción, puede acrecentarse y también marcan una expresión cultural determinada.
2) Tiene un inicio, desarrollo y un desenlace. Pero hay una diferenciación entre ritmos constantes y tendencias temporales.
3) Existen las discrepancias, los cuales pueden llegar a ser conflictos.
4) Las contradicciones son inherentes al sistema. Alcanzan intensidad cuando está en crisis o transición.
5) La caída es inevitable y se da lugar a un nuevo sistema. Y “los sistemas sucesores eran moralmente iguales igual que sus predecesores”
[2], pero también puede haber un progreso. De una u otra forma la crisis es igual a metamorfosis.

Por medio de la descomposición a causa de la revolución, entonces el único evento posible para la resistencia radica en la instauración de un orden mundial socialista, así los pactos ente el Norte y el Sur sólo obtendrá un resultado minúsculo a la hora de conseguir un orden mundial.

En la actualidad el sistema se llama ECONÓMICO CAPITALISTA MUNDIAL, cuenta con limitantes, cuenta con división del trabajo, no tiene una organización política única. Esto se incorporó en todo el planeta y contiene dos contradicciones en el marco económico y la esfera política. Castiga o premia de forma material.

Las contradicciones se dan cuando el capitalista baja por obligación el costo de la mano de obra. “A corto plazo, el acumulador de capital es salvaje. A medio plazo, es “cooperativo”. Y a largo plazo, el sistema queda sovacado”.
[3]

Los remedios a largo plazo y paralizaciones a corto plazo traen secuelas políticas, que provocan la disociación de grupos y obtención de beneficios. En la actualidad se vive en un declive de la economía capitalista y la objeción está entre las ciencias y las organizaciones reflexivas, que se oponen a la Ilustración.

CRISIS DE LOS MOVIMIENTOS
Corresponde más a sus derrotas que a sus victorias y y su explicación no reside en incumplimientos, sino en prenses impersonales. Los movimientos antisistémicos han cosechado un éxito notable en alcanzar el poder, pues los países industrializados occidentales ayudan a los países no desarrollados. El segundo bloque de países ha fundado países socialistas. El tercer grupo gracias a los movimientos nacionalistas y de liberación nacional. Los descontentos en todo mundiales:
1.- Los socialdemócratas del poder.
2.- Los comunistas del poder.
3. Los nacionalistas del poder.

La queja se extrae, por los excluidos y los movimientos de poder.


CRISIS EN EL AMBITO DE LAS CIENCIAS
La ciencia, es la expresión filósofa por excelencia de la modernidad. Se sostiene bajo el argumento de que el mundo entero es comprensible, se debe generalizar y los acontecimientos pueden diseñarse en leyes universales y por último que a través la ciencia puede conocerse el mundo por completo.

PRONÓSTICO
En el mundo debe de a haber un “Progreso”, que nos permita crear un orden mundial socialista que sea tan igualitario como democrático. También apunta que para que se de ese orden debe de haber un orden que resuelvan las dos crisis que plantea él, la de los movimientos y las ciencias.

El sistema caerá en la no transformación, para seguir manteniendo su poder.
Immanuel Wallerstain, predice que la crisis estará en su auge en 2035 y será a largo plazo y está estará producida por una serie de crisis de cortas y una de ellas es la de 2009, que tuvo sus inicios en 2008, por la caida de la bolsa en Wall Street.BIBLÍOGRAFÍA:

Immanuel Wallerstein, Geopolitica y Geocultura. Ensayos sobre el moderno sistema mundial., Kairós, Barcelona, 2007. Pág. 147-171.
[1] Immanuel Wallerstein, Geopolitica y Geocultura. Ensayos sobre el moderno sistema mundial., Kairós, Barcelona, 2007. Pág.146
[2] Ibíd. Pág.149
[3] Immanuel Wallerstein, Geopolitica y Geocultura. Ensayos sobre el moderno sistema mundial., Kairós, Barcelona, 2007. Pág. 152

jueves, 26 de marzo de 2009

Tipología de Crisis

Escrito por Irvin Lechuga Otamendi

“Tipología de Crisis”. Sugiere la existencia de una multiplicidad de crisis. El argumento del ensayo parte de que en términos de espacio y tiempo existe la única crisis, la cual se manifiesta en tres distintas partes de la sociedad.

Crisis.

Se usa para designar todos los descensos de cualquier curva cíclica en cualquier ámbito. Tiene muchas connotaciones negativas. Pero en este caso el autor considera otro concepto de lo que es crisis para el tema a tratar: circunstancia rara, la cual en un sistema histórico ha evolucionado hasta el punto en que el efecto acumulativo de sus contradicciones internas impide que el sistema resuelva sus propios dilemas por medio de ajustes en sus patrones institucionales vigentes.

Por lo que en la breve descripción de una crisis existen seis supuestos ocultos:

1.    La unidad significativa de análisis social es un sistema histórico, un proceso en curso de división social del trabajo que se organiza sobre ciertos principios fundamentales –modo de producción-.

Hablar de una división del trabajo implica la existencia de una serie de procesos de producción estructurados que se sitúen en cierto marco político y se plasmen en cierta expresión cultural, a pesar de que éstos no sean necesariamente simples.

2.    Todo sistema histórico sigue una trayectoria, comienzo, desarrollo y un final.

3.    En todos los sistemas históricos hay contradicciones, las cuales no hacen referencia a los conflictos, los cuales existen también. Las contradicciones hacen referencia a presiones estructurales que obligan a los grupos a moverse en dos direcciones opuestas al mismo tiempo.

4.    Ya que las contradicciones son inevitables, se deduce que todo sistema histórico acabará por socavar su propia capacidad de supervivencia, es por eso que se dice que los sistemas históricos desaparecen.

5.    Cuando las contradicciones alcanzan cierto nivel de intensidad, se pude decir que el sistema histórico entra en crisis. Periodo de Transición que bien podría prolongarse por siglos.

6.    En tanto que el declive es inevitable puesto que las contradicciones son ciertas, lo que viene después de la transición queda históricamente abierto.

Hay muchos ejemplos en que los sistemas sucesores eran moralmente iguales que sus predecesores, y algunos en los que se produjo una regresión en toda regla, pero están en los que hubo progreso. “El hombre labra su propia historia” [1]

“La crisis se define necesariamente como Transformación” [2]

“La cuestión clave estriba en saber adónde nos dirigimos a partir de aquí, y lo primero que cabe apuntar es que no podemos saberlos a ciencia cierta” [3]

 

Como discutíamos en la clase del pasado viernes, hay que hacer en primera instancia una diferencia entre Trabajo y Empleo.

Trabajo, es toda aquella actividad que se desempeña para un fin determinado con cierta remuneración; y empleo, es aquello “que se necesita” para hacer un trabajo.

De una u otra forma, el trabajo como tal no puede desaparecer, y menos en una sociedad capitalista, ya que todo está conectado. Como lo hemos visto si alguna de las instituciones cae, habrá un caos, algo de lo que Marx abordó en su teoría sobre el Socialismo-capitalismo y que hemos abarcado.

 

 

 

 

 

 

[1] [2] Immanuel Wallerstein. Geopolítica y Geocultura. Página 149.

[3] Immanuel Wallerstein. Geopolítica y Geocultura. Página 168.

 

Wallerstein, Immanuel.  Geopolítica y Geocultura: Ensayos sobre el moderno sistema mundial. Editorial Kairos. Primera edición. España, 2007. P.p. 336

 

CAPITULO 9: ECONOMÍA CAPITALISTA.

Nuche Varela Vania Lucero.
Geopolítica y Comunicación.
27 de marzo de 2009.

“LA ECONOMÍA MUNDIAL CAPITALISTA:
PERSPECTIVAS A MEDIO PLAZO”.

Las constantes dificultades que enfrenta la economía capitalista mundial, lanzan una afirmación definitiva: este sistema está destinado a extinguirse. En consecuencia, se ha despertado una preocupación global por el destino de la estructura económica-política de la sociedad; todo gira en torno a la interrogante de qué se puede esperar para los próximos cincuenta años.
Para comprender mejor la evolución de tales complicaciones en el sistema capitalista, se ha hecho una división en dos fases: la fase A de Kondratieff clásico y una fase B de Kondratieff estándar.
La fase A hace referencia a un periodo de monopolios predominantes de ciertos productos con un alto porcentaje de beneficio y donde el superávit generado no era distribuido de manera igualitaria, tanto social como territorialmente. Esta expansión monopolística finalizó a causa de la entrada de un número cada vez mayor de competidores de mercado, llevando al debilitamiento de los monopolios y por ende, al descenso en la productividad. Derivado de esto, surge un estado de estancamiento económico.
La fase B indica el alto índice de desempleo mundial entre la población trabajadora asalariada, la presencia de una etapa de competencia fuertemente politizada por el mercado mundial, una mayor concentración de capital, entre muchas otras características del estancamiento económico.
A pesar de que cada periodo muestra caras positivas y negativas, todo parece revelar una tendencia de favoritismo hacia la fase A, pues esos periodos suelen considerarse más satisfactorios para el capital mundial, e incluso para la población general.
Estados Unidos, como se ha visto previamente, se fortaleció de forma importante luego de 1945, tanto en el ámbito político como en el social, gracias a su extraordinario crecimiento económico. En virtud de ello, efectuó su poderío y ejerció su influencia cultural a través del esparcimiento internacional de su ideología del desarrollo, su liderazgo en las ciencias sociales, la cultura y las artes, además de la imposición del inglés como lengua única del sistema mundial.
El ascenso de Estados Unidos como país hegemónico despertó enormes inconformidades dentro de los países del Tercer Mundo, quienes eran los más afectados con las nuevas disposiciones del capitalismo emergente. Esta zona adquirió una gran fuerza política después de la Segunda Guerra Mundial.
Asimismo, se desataron desequilibrios políticos notables con la explosión de las guerras en Vietnam y en Argelia. En general, hubo un despertar generalizado de movimientos antisistémicos incompatibles con la hegemonía del país norteamericano.
Esto por supuesto, fue una respuesta al estancamiento económico, factor que acentuó en gran medida, el declive del poder político estadounidense, en conjunto con los resultados de la revolución de 1968: un intenso cuestionamiento a la ideología del desarrollo, la transformación de las ciencias sociales, la cultura y las artes en un terreno pluralista y multicéntrico, así como la incipiente y paulatina utilización de otros idiomas, en el orbe.
Aparece de este modo, la figura de Japón y Europa Occidental como nuevos territorios “potencia”. Supuestamente, serán éstos (más Japón que Europa) quienes se colocarán en el lugar de poder económico-político. Precisamente, Japón es el país que ha manifestado un avance superior en su desarrollo nacional, destacándose entre otros aspectos, por sus estupendas aportaciones en el renglón tecnológico y por tanto, cabe la posibilidad de una sociedad entre dicho país y Estados Unidos. Si esta situación se presenta, todo apunta hacia un sendero de control tecnológico mundial a manos de estas dos naciones.
Lo anterior significaría un primer vector dentro de las perspectivas de mediano plazo en la economía capitalista. De él, se desprenden los demás vectores: 2. una gran ofensiva europea hacia el proteccionismo, donde Europa Occidental se “aliaría”, o mejor dicho, incluiría a su zona el resto de los territorios distintos a E.U.A y Japón; 3. La proyección Norte-Sur, implicaría una participación más destacada del Tercer Mundo dentro de la producción de la economía mundial, hecho que a su vez, representaría el aumento de la explotación de las áreas periféricas y aunado a ello, el aumento del deterioro ambiental; y finalmente, el 4. La renovación de la revolución mundial de 1968: una especie de consenso entre los “nuevos” y los “viejos” movimientos para lograr una transformación social.
El recuento de estos acontecimientos lleva a la consideración de tres posibles escenarios para el futuro del sistema económico capitalista. El primero de ellos pone de relieve la detonación de una nueva guerra mundial, en la cual estaría involucrado un fatal desastre nuclear de incontables resultados.
El segundo contexto posible podría ser que la sociedad enfrente las problemáticas del sistema, es decir, su agotamiento y la amenaza latente del desastre nuclear, y por esa razón tome la determinación de reorganizar el orden existente para transformarlo en algo distinto.
Por último, el tercer escenario: el desmoronamiento del sistema mundial. La dirección trazada sería el inevitable caos social, evento que posiblemente llevaría a la conformación del nuevo orden mundial, caracterizado por ser relativamente igualitario y democrático.
Así, nos encontramos ante un contenedor de caminos viables, opciones diversas para el destino del sistema mundial, mismo que dependerá totalmente del modo en cómo se resuelvan los conflictos existentes dentro el terreno de los movimientos antisistémicos y de las ciencias, primordialmente las sociales.


BIBLIOGRAFÍA:* WALLERSTEIN, Immanuel. Geopolítica y Geocultura. 1ra. Edición, Barcelona, Editorial Kairós, 2007. 336 PP.

miércoles, 25 de marzo de 2009

Bibliografias




Díaz Hernández Ellem Danae 13 de marzo del 2009


Herbert MARCUSE
Herbert Marcuse nació en Berlín, en 1898, en el seno de una familia judía de buena posición económica. De muy joven se sintió atraído por la política. Adhería a las posiciones de izquierda. Pero el fracaso de la revolución espartaquista y la ejecución de Rosa Luxemburg (1919) lo alejaron de Berlín y de la política.
Estudió Filosofía en las universidades de Berlín y Friburgo. En esta última conoció a Husserl y a Heidegger. Éste último dirigió su tesis, con la que se doctoró en 1922. Permaneció en Friburgo hasta 1933, año en el que ingresó en el Instituto de Investigación Social de la Universidad de Frankfurt (más conocido como Escuela de Frankfurt). Ese mismo año los nazis llegaron al poder y clausuraron el Instituto. Marcuse, junto a otros miembros de la Escuela, se trasladó a Estados Unidos. Allí se estableció llegando incluso a adoptar la nacionalidad americana, en 1940, y a trabajar para el gobierno federal. Ejerció la docencia en distintas universidades: Columbia, Harvard, Boston y San Diego. Su pensamiento fue una de las fuentes de inspiración de la revuelta estudiantil de 1968, conocida como “mayo francés”. Murió en Alemania en 1979.
Además de la filosofía de Hegel, Marx, Dilthey, Husserl y Heidegger, tuvo una importante presencia en la formación de su pensamiento el psicoanálisis de Sigmund Freud. En Eros y civilización (1955) retoma la teoría freudiana según la cual la civilización se apoya sobre la represión permanente de los instintos humanos, reemplazando la satisfacción inmediata de los mismos por una satisfacción diferida. “El metódico sacrificio de la libido, su desviación inexorablemente impuesta, hacia actividades y expresiones útiles desde el punto de vista social, son la cultura” dice Marcuse, sintetizando la visión freudiana. Al dejar el “principio de placer” y asumir el “principio de realidad”, “el ser humano, que era poco más que una maraña de tendencias animales, se convirtió en un yo organizado”.
Una civilización no represiva es una quimera para Freud. El principio del placer y el de realidad son antagonistas irreconciliables. Marcuse no coincide con el fundador del psicoanálisis en este punto. Desde una visión de la historia inspirada en el materialismo-histórico de Marx, considera que esta oposición no es metafísica, que no se origina en la naturaleza humana, sino que es producto de una organización social histórica determinada.
El progreso tecnológico ha creado las condiciones para una liberación respecto de la obligación del trabajo, para una ampliación del tiempo libre. Marcuse considera que ello permitirá la liberación de las potencialidades reprimidas que, “así liberadas, crearán nuevas formas de realización y de descubrimiento del mundo, que a su vez otorgarán una nueva forma al reino de la necesidad, a la lucha por la existencia. Así se dan las condiciones para el surgimiento de una sociedad no represiva en la que se viva la felicidad del Eros liberado, la lógica de la satisfacción y no ya la de la represión”.
¿Qué impide el arribo a esta nueva sociedad? El poder que, con el fin de perpetuarse, alimenta un estado de necesidad que ya no es tal. Así, por ejemplo, transforma lo que podría haber sido una liberación sexual (una evolución hacia una sexualidad polimorfa que Marcuse propugna y entiende como propia de una sociedad no represiva) en un consumismo sexual, en una sexualidad tomada como objeto de consumo, integrada al sistema. La pretendida “liberación de las costumbres” que permite y propugna el capitalismo no es una verdadera “liberación” sino una estrategia para impedirla.
En El marxismo soviético (1958) critica duramente la evolución de la revolución Rusa y su tendencia a la burocratización. Critica también que se haya hecho del marxismo un dogma y que el Estado haya quedado en manos de una casta de burócratas investidos de un poder totalitario. De este modo, el marxismo se ha convertido allí en instrumento al servicio de una sociedad represiva, burocrática y totalitaria.
En El hombre unidimensional (1964), su obra más famosa, presenta a la sociedad capitalista “avanzada” como una sociedad en la que el hombre ha perdido su sentido crítico. El consumismo y la “liberación de las costumbres” lo han transforman en un ser cada vez más adaptado e integrado al sistema. Ya no hay espacio para la oposición y la crítica, la sociedad unidimensional “integra en sí toda auténtica oposición y absorbe en su seno cualquier alternativa”. En ella se da “una confortable, tersa, razonable, democrática no libertad”. El capitalismo avanzado ejerce su dominio, su control total, de un modo sutil, manipulando los deseos y las necesidades de las personas. “No sólo determina las ocupaciones, las habilidades y las actitudes socialmente requeridas, sino también las necesidades y las aspiraciones individuales”.
La filosofía de esta sociedad unidimensinal es el positivismo, que sirve de base a la racionalidad tecnológica y a la lógica del dominio. Y esta filosofía no tiene rival porque se ha anulado el espacio de la crítica.
Contra las previsiones de Marx, hasta el propio proletariado ha perdido su impronta revolucionaria, seducido por el confort y el consumismo. Por esta razón Marcuse busca otros sujetos revolucionarios, y los encuentra en los extranjeros, los explotados, los desocupados, las minorías, los marginados y los excluidos del sistema. Su sola presencia muestra la necesidad de poner fin a condiciones e instituciones intolerables. De todos modos Marcuse no aclara cómo sería un proceso revolucionario protagonizado por estos actores. Prefiere que su pensamiento permanezcan en la negatividad, en la crítica, unido a “aquellos que, sin esperanza, dieron y dan la vida por el Gran Rechazo”.















Theodore Roszak

Theodore Roszak es un profesor emérito de Historia, nacido en Chicago (Illinois) en 1933. Completó su doctorado en Filosofia en Princeton (1958). En 1969 publicó un libro revelador basado en sus reflexiones sobre la sociedad tecnocrática y su oposición juvenil. El nacimiento de una contracultura (en castellano, Editorial Kairós) (The Making of a Counter Culture). En 1972 analizó la política y la trascendencia en la sociedad postindustrial en Where The Wasteland Ends. En 1975 dio a conocer Unfinished Animal, estudio sobre la evolución de la conciencia. Aportó otra obra reveladora: Person/Planet (The Creative Disintegration of Industrial Societv). Entre otras tantas obras, se destacan también: The Voice of the Earth, The Cult of Information (editado en español por Gedisa), The Gendered Atom: Reflections on the Sexual Psychology of Science, The Voice of the Earth and Ecopsychology: Healing the Mind, Restoring the Earth. Así mismo, escribió una famosa novela llamada Flicker. Hoy es profesor emérito de historia en la Universidad Estatal de California en Hayward. Enseñó en las universidades de Stanford, de British Columbia, de San Francisco y en el Schumacher College en Inglaterra.

BIBLIOGRAFIA:

http://humanismoyconectividad.wordpress.com/

http://www.luventicus.org/

TIPOLOGIAS DE CRISIS DEL SISTEMA MUNDIAL.


UNAM
FCPyS
Geopolítica y comunicación
Díaz Hernández Ellem Danae
Gpo: 0005



TIPOLOGIAS DE CRISIS DEL SISTEMA MUNDIAL.


Este texto nos habla sobre la crisis del sistema mundial y sus tipologias las cuales son la crisis de los movimientos y crisis de las ciencias.

El texto nos menciona que la tipologia de la crisis sugiere la existencia de una multiplicidad de crisis.

Crisis es un termino muy desgastado, empleado con frecuencia para designar todos los descensos de cualquier curva cíclica en cualquier escala, suele aludir a algo que uno desea superar cuanto antes para que no tenga lugar consecuencias funestas.

Una crisis es una situación en la cual se evidencia la certeza de la desaparición del sistema histórico existente y que por tanto enfrenta a quienes se encuentran en el a una verdadera alternativa histórica: que tipo de sistema histórico nuevo construir o crear.

La unidad significativa de análisis social es un sistema histórico en el que existen espacio y tiempo reales, los cuales forman parte de su propia definición y deben especificarse. Un sistema histórico puede expandirse.

Todo sistema histórico sigue una trayectoria: un comienzo, un desarrollo y con el tiempo un final. Pero la duración de esta trayectoria puede ser variable.

Las estructuras que subyacen bajo estos sistemas históricos constituyen la longue durée de Braudel, dentro de este existen procesos cíclicos que constituyen las conjunctures.

En todos los sistemas históricos hay contradicciones, las cuales no hacen referencia a los conflictos.

Cundo las contradicciones alcanzan cierto nivel de intensidad, uno puede decir que el sistema histórico entra en crisis. Este periodo de crisis también puede denominarse periodo de transición. Lo que viene después de la transición queda históricamente abierto. El progreso es una posibilidad indiscutible pero lisa y llanamente. De ahí la frase que dice “el hombre labra su propia historia”.

La crisis significa necesariamente transformación.

El sistema mundial moderno es una economía capitalista. Esta economía es capitalista en el sentido de que se basa en el funcionamiento de una “ley de valor”. Esta economía ha desarrollado ciertas presiones culturales sistemáticas diseñadas para promover su funcionamiento.

Esta economía capitalista no es el primer sistema histórico de este tipo que ha existido, pero es el primero de su clase que ha sobrevivido tanto tiempo.

El sistema mundial moderno nació en el siglo XVI, hasta que hacia mediados o finales del siglo XIX logro incorporar todas las zonas geográficas del planeta a su división social del trabajo.

Esta economía sigue vigente y todavía hoy incluye en su división social del trabajo todas las zonas geográficas del planeta.

Las contradicciones que este sistema encierra son múltiples y complejas, destacan entre ellas dos contradicciones generales una en la esfera económica y otra en la esfera política.

En la esfera económica, la contradicción esencial estriba en el curioso doble papel del acumulador de capital. El acumulador de capital esta obligado tanto a bajar el coste de la mano de obra como aumentarlo.

Desde la primera guerra mundial y la Revolución Rusa fue cuando se empezó a dar la crisis de la economía capitalista mundial.

La crisis de los movimientos no se queda en un mero asunto de subidas y bajadas cíclicas. Esta crisis es aquella que se debe mas a sus victorias que a sus derrotas, se trata de una crisis estructural no moral, su explicación fundamental no reside en sus incumplimientos, sino en sus presiones objetivas.

Aun así no es ningún secreto que existe un gran descontento en todo el mundo en relación con: los socialdemócratas en el poder, los comunistas en el poder y los accionistas en el poder.

En todos los escenarios principales del sistema mundial han surgido nuevos movimientos que han puesto a los viejos movimientos que ostentan el poder en el punto de mira. En los países occidentales, estos nuevos movimientos sociales han adoptado la forma de un conjunto de organizaciones que no han adquirido estructura organizativa alguna. En las zonas socialistas estos nuevos movimientos también han adoptado formas diversas los cuales son los “movimientos de reforma” y los movimientos externos al partido. En los tres continentes, estos movimientos de nuevo cuño a menudo han tomado la forma de movimientos de renovación religiosa.

La crisis en el ámbito de las ciencias no difiere tanto de la crisis de los movimientos como en un principio uno pudiera imaginar.

La ciencia es la expresión intelectual por excelencia de la modernidad. Se sostiene sobre tres premisas fundamentales. La primera es que todo lo que forma parte del mundo real es cognoscible.

La segunda premisa consiste en que cuado mas amplia es una generalización mejor es y que e la ultima instancia todas las generalizaciones relevantes pueden plantearse en términos de leyes universales, sin tener en cuenta el espacio-tiempo.

La tercera premisa es que la única manera en que uno puede conocer de veras el mundo real es a trabes de la ciencia.

Cada una de estas premisas ha sido refutada. Solo ha partir del siglo XIX la historia y las ciencias sociales lograron obtener el droit de cité.

Sin embargo las premisas de a ciencia moderna y la historiografia dominante no encerraba mas neutralidad que sus modelos. Las premisas se cuestionan no solo entre los científicos sociales históricos, sino también entre los físicos, los presuntos sumos sacerdotes de la religión de las ciencias modernas. Esto es lo que podemos usar para darnos cuenta que estamos ante una crisis de la ciencia.

El cuestionamiento de las premisas científicas y los mitos históricos dominantes no es lo que ha desencadenado la crisis en el ámbito de las ciencias. Se trata más bien de la expresión dicha crisis provocada por el hecho de que las ciencias se hayan adentrado progresivamente en un callejón sin salida.


BIBLIOGRAFIA:

Immanuel Wallerstein, Geopolitica y Geocultura. Ensayos sobre el moderno sistema mundial., Kairós, Barcelona, 2007. Pág. 146-171

EL HOMBRE UNIDIMENSIONAL.


UNAM
FCPyS
Geopolítica y comunicación
Díaz Hernández Ellem Danae
Gpo: 0005


EL HOMBRE UNIDIMENSIONAL.

El Hombre Unidimensional, es donde Marcuse hace un diagnóstico rápido del capitalismo. El punto de partida que toma es el rechazo que toda la izquierda universal haría del capitalismo en los años 60: alienación, productivismo, consumismo, medios masivos alienadores, publicidad estudipizante, todo esto y mucho más es lo que convertiría según Marcuse al hombre potencialmente libre en un hombre unidimensional incapaz de pensamiento crítico y de actitudes contestatarias.

A diferencia del marxismo clásico, para Marcuse el proletariado no era una clase revolucionaria en sí ni mucho menos, y él personalmente era más escéptico aún ante la supuesta inevitabilidad de la crisis capitalista sostenida una y otra vez por la astucia de la razón capitalista.

Para Marcuse, los medios de comunicación y las industrias culturales, así como las expresiones de la publicidad comercial, reproducen y socializan en los valores el sistema dominante y amenazan con eliminar el pensamiento y la crítica. Los efectos de esta orientación mediática crean un escenario cultural cerrado, unidimensional, que propicia una especie de pensamiento único y determina la conducta del individuo en la sociedad. Los medios crean una estructura de dominación, bajo la apariencia de una conciencia feliz que inhibe la posibilidad de cambio hacia la liberación. Los medios de comunicación, a través de un lenguaje informal, no dan explicaciones ni ofrecen conceptos, sino que aportan imágenes. Descontextualizan, niega la referencia histórica. Lejos de moverse entre la verdad o la mentira, se limitan a imponer un modelo.

Aunque la tesis central de El hombre unidimensional era tremendamente pesimista, y a pesar a de que la obra fue criticada tanto por la derecha como por la izquierda, Marcuse era subterráneamente propositivo, utópico, y tenía una esperanza profunda en la transformación social.

BIBLIOGRAFIA:

El hombre unidimensional de Herbert Marcuse 2ª edición, Barcelona, 1994.

lunes, 23 de marzo de 2009

CApItUlo 9. "La EcOnOmIa MuNdIaL CaPiTaLiSta; PeRsPeCTiVaS a MeDiAnO PlaZo"


Karla Aguirre Loredo
Geopolitica y Comunicación
Fecha: 24 de marzo de 2009


CAPITULO IX “LA ECONOMIA MUNDIAL CAPITALISTA; PERSPECTIVAS A MEDIANO PLAZO”


El autor presenta en este breve ensayo, cuya información se encuentra dividida en tres grandes periodos que considera prudentes para desarrollar su análisis sobre el sistema mundial: de 1945-1988; de 1988 a aproximadamente 2000 y el medio plazo de 2000-2050: los vectores posibles.
De entrada el autor señala que a un corto plazo, la economía mundial capitalista se halla ante ciertas dificultades que muy pronto podrían agravarse. Esta viene siendo una predicción, que trasladándola a la actualidad posee un grado de verdad, dados lo problemas que han venido surgiendo en el año 2008 con la crisis de Estados Unidos, eje principal del sistema capitalista.
Apunta que los intelectuales pueden aportar algo al ámbito de la política real, precisamente está a su alcance (un alcance muy ilimitado, por descontado) realizar ese tipo de valoraciones sobre las verdaderas alternativas a las que se enfrenta el mundo real.


EL SISTEMA MUNDIAL, 1945-1988


La economía de este periodo, se vio influenciada tras el fin de la Segunda Guerra Mundial, tuvo lugar una gran expansión económica de la economía mundial capitalista. Esta toco a su fin tal vez en 1967 o en 1973.
Se clasifican dos fases respecto a Kondratieff clásica; en la fase A se caracteriza por ser un periodo alimentado por monopolios y el superávit. A causa de las consabidas razones económicas, esta expansión tocó a su fin y ha sido seguida de un estancamiento económico. Tocó a su fin porque monopolios relativos quedaron debilitados por la entrada en el mercado mundial de gran número de competidores, que trataban de subirse al carro. En la fase B, se origina un alto índice de desempleo en todo el mundo, competencia profundamente polarizada entre los países centrales por un mercado mundial cada vez más restringido. De hecho en esta parte el autor hace mención de algo muy importante, porque señala que en esta época surgen traslados geográficos de procesos de producción y búsqueda de innovaciones productivas. La situación se encuentra en un proceso de estancamiento global, que puede prolongarse hasta alrededor del año 2000- señala-.
En general de 1945-1988 guarda estrechas correspondencias con su economía. En la fase A 1945-1967, asistimos al periodo de hegemonía estadounidense en el sistema mundial. Tema tratado en otro capitulo del mismo autor. Estados Unidos asumió una preponderancia política y militar incuestionable dentro del sistema mundial, que se tradujo incluso a un liderazgo cultural. El cual se concentro en una ideología de desarrollo y en el ámbito de las ciencias sociales contemporáneas, la cultura y las artes y un aspecto importante que aun subyace hasta nuestros días la imposición del idioma inglés a nivel mundial.
Cabe destacar que después de 1945, el Tercer Mundo emergió como una fuerza política ya que con las guerras en Argelia y Vietnam se causó un desequilibrio político, además la Revolución Mundial de 1968, marcó una revuelta no sólo contra la hegemonía estadounidense, sino también contra los propios movimientos antisistémicos clásicos (tanto socialistas como nacionalistas).
Claro todo lo anterior sin contar que lo que sucedió con la U.R.S.S que marcó un nuevo mapa territorial y reflejó cambios en la Geopolitica del mundo.
Después de 1968, las ciencias sociales, la cultura y las artes se convierten de nuevo en un ámbito pluralista y multicentrico. La utilización en todo el mundo de lenguas distintas al inglés empieza a reavivarse, aunque lentamente.


SISTEMA MUNDIAL DE 1988 A APROXIMADAMENTE 2000


En este período se presenta la resistencia estadounidense al declive de su hegemonía. El panorama no se presenta mucho más prometedor en relación con la lucha global por la sucesión. Sólo existen dos centros geográficos que cuenten con una potencia económica alternativa: uno es Japón, el otro Europa Occidental en torno a su núcleo germano-francés. Ambos centros, en el periodo de 1967 a 1988, se han dedicado sobre todo a ocuparse de sus propios asuntos en el plano político y a concentrarse en fortalecer su competividad económica en el mercado mundial.
Para el año 2000 vuelve a predecir el autor, que es de esperar cada vez mayor claridad por parte de los movimientos a la hora de abordar los asuntos, así como que se comience a crear un nuevo consenso acerca de una estrategia a medio plazo que reemplace a la que se combatió en 1968 y a la que no se renunció por completo.
La proyección realizada indica que para el año 2000 recae acerca de cómo podemos conocer la realidad social para sustituir el maltrecho, aunque todavía persistente, consenso decimonónico.


EL MEDIO PALZO (2000-2050): LOS VECTORES POSIBLES


Al autor plantea cuatro vectores respecto a dónde considera que se dirige el sistema mundial.
1. Consiste en el aumento cíclico del potencial de acumulación de la economía mundial capitalista. Par el siglo XX, las innovaciones en microprocesadores, ingeniería genética y fuentes de energía nuevas habrán alcanzado un grado de perfeccionamiento capaz de sostener los sectores industriales punteros más importantes del mundo. Para que se pueda lograr ello, habrá elementos cruciales; uno es el coste de la tecnología y dos la producción monopolizada. En síntesis se afirma que en primer elemento ésta sobre todo en función de la tecnología, el segundo elemento se alcanza fundamentalmente por medio de acuerdos políticos. Lo que sorprende de sobre manera es que el autor especifica que para el año 2000 la tecnología va a quedar en manos del consorcio Japón-Estados Unidos, y que este conseguirá la delantera tecnológica al menos durante diez años. Una realidad hoy.
2. Una gran ofensiva europea hacia el proteccionismo. Se habla de proteccionismo generalizado ya que se considera que la división zonal limitada a dos zonas: la esfera del consorcio Japón-Estados Unidos y la otra zona.
3. La proyección Norte-Sur. La renovada expansión de la economía mundial implicaría necesariamente una participación mayor de zonas del Tercer Mundo en las cadenas de producción de la economía mundial. Otra predicción se encuentra enfatizada en el asunto de que puede que se produzca un desasosiego masivo, o una variante u otra de revolución: en Indonesia o Nigeria, en Pakistán o en México.
4. La Renovación de la Revolución mundial de 1968. Se piensa en esta renovación en relación con los dos terrenos: los movimientos y las ciencias (sociales).
Si fuesen posibles las predicciones realizadas en el texto, entonces el autor ahora se propone tres posibles escenarios, respecto a la expansión económica mundial capitalista posterior a 2000:
1. Siguiendo el patrón clásico de lso tres ciclos hegemónicos previos, la lucha por la hegemonía que enfrentase a Japón (aliado con Estados Unidos y China) y Europa Occidental (aliada con la U.R.S.S.), desemboque en una guerra mundial, que podría estallar, por ejemplo, en 2050. El único problema del que todos tenemos conciencia es de que esta guerra sin dudas supondría un desastre nuclear de proporciones inconmensurables.
2. El mundo enfrentado al agotamiento del sistema mundial existente ya l temor de un desastre nuclear, reorganice deliberadamente el orden existente y lo convierta en algo distinto.
3. El desmoronamiento del sistema mundial. asistiríamos al caos social.

Sin lugar a dudas lo presentado por el autor nos muestra, una serie de predicciones que él realizo con base en lo que observaba y cómo era la situación en su época. Curiosamente resultó que en más de una logró atinar a los hechos que se viven en el mundo actual. Y para los cuales se deben de tomar medidas muy serias para poder salir de los problemas ya que si se cumple lo dicho por el autor para el año 2050 el mundo se va a encontrar en graves situaciones.

BIBLIOGRAFIA:
ü Wallerstein, Immanuel. Traducción de Vázquez Nacarino, Eugenia.
“Geopolítica y Geocultura, ensayos sobre el moderno sistema mundial”
Editorial Kairós
Barcelona, Febrero del 2007
336 pp.

miércoles, 18 de marzo de 2009

TIPOLOGÍA DE CRISIS DEL SISTEMA MUNDIAL

Díaz Solis Lorena

En el capítulo 8 del libro se habla de un tema bastante interesante, sobre todo porque nos encontramos en una situación igual hoy en día: la crisis mundial.
Immanuel Wallerstein muestra las ideas que algunas personas tienen por crisis, pero a su parecer considera que es una circunstancia rara en donde un sistema histórico ha evolucionado. Es una situación en la cual se evidencia la certeza de la desaparición del sistema histórico existente.
Existen seis “supuestos ocultos” que el autor menciona:


1. La unidad significativa es un sistema histórico. Es un proceso en donde existe la división del trabajo que se organiza sobre ciertos principios. Esta división del trabajo implica la existencia de una serie de producción estructurados.
2. El sistema histórico tiene un principio, un desarrollo y un final.
3. Siempre existen contradicciones y éstas hacen referencias a presiones estructurales que obligan a los grupos a moverse en dos direcciones opuestas.
4. A partir de estas contradicciones, el sistema histórico terminará socavando su propia capacidad de supervivencia, es entonces cuando se habla de una desaparición inevitable de los sistemas históricos.
5. Las contradicciones alcanzan una intensidad en la que el sistema histórico entra en crisis. El desarrollo que tiene ya no podrá seguir su curso como debe o mejor dicho, ya no será recomendable por mucho más tiempo. Se entra a un período de transición.
6. Cuando todo esto es inevitable, Wallerstein dice que lo que viene después de la transición queda históricamente abierto.


Algo que me llamó la atención de esta parte, es que dice que la crisis significa transformación. Se hace la pregunta de si ¿la crisis mundial implica la transformación mundial? En mi opinión creo que sí, ya que no todo queda igual después de una situación de tal magnitud (si ponemos como ejemplo la crisis mundial que vivimos hoy en día y que ha dejado sin empleo a miles de personas), sobretodo cuando los afectados son toda la población mundial y no sólo una parte de ella.Además de lo anterior, el autor hace una descripción sobre el sistema capitalista en el que vivimos. Dice que el sistema mundial moderno es una economía capitalista mundial que cuenta con limitaciones de la división social del trabajo pero que carece de una única estructura política unificadora. Esto no impide que tenga una superestructura política en la que es la red de estados soberanos, miembros de un sistema interestatal.

Es un sistema capitalista porque se basa en una ley denominada “ley de valor” que implica la distribución de recompensas a quienes dan prioridad a la acumulación de capital.
Llama la atención que ha sido un sistema que ha perdurado por bastante tiempo, aunque no ha sido el primero. Ha sido el único que ha permitido que el modo de producción capitalista se despliegue por completo y desarrolle todo su potencial.

La “crisis de los movimientos” es otro tema de los que habla el capítulo. Esta crisis es aquélla que se debe más a sus victorias que a sus derrotas, es una crisis estructural y que no reside en sus cumplimientos, sino en presiones objetivas.

Los movimientos socialistas y los nacionalistas creían que el centro de poder político con más accesibilidad se hallaba en los Estados. Si esto llegase a ocurrir, se podía deducir que la estrategia con más posibilidades de transformar el sistema consistía en obtener, de un modo u otro, control sobre el poder estatal. Esta estrategia contaba con oponentes que tenían desconfianza en el poder del Estado. Se les llamó “anarquistas” y perdieron el terreno en el debate interno de los movimientos antisistémicos.

Sin embargo, en el mundo hay un descontento que se basa en tres cosas: los socialdemócratas en el poder, los comunistas en el poder y los nacionalistas en el poder. Esto se me hizo bastante irónico, ya que nadie en el mundo se siente satisfecho con quien tienen al frente en el poder, entonces ¿qué necesitamos? Eso es algo que vale la pena reflexionar.

Las inconformidades surgen por tres cosas: la primera es que siempre existe un grupo que se siente excluido en lo que se refiere a los logros de los movimientos. Son los ya conocidos “marginales”, la segunda cosa es que estos movimientos son asimilados dentro del sistema y neutralizados: ya no desempeñan un papel de revolucionarios y tercero, los movimientos del poder adoptan una conducta explotadora a favor de un grupo más reducido con el que compartía ese poder.

Los pronósticos que tiene Immanuel Wallerstein es cuestionarnos en saber a dónde nos dirigimos. A su parecer, es algo muy tranquilizador a largo plazo, aunque al mismo tiempo alarmante en el futuro inmediato.

Menciona que el progreso es una posibilidad en toda ley. Puede que la transformación social de la que nos planteaba al comienzo del texto nos conduzca hacia la creación de un orden mundial socialista que sea tan igualitario como democrático.

En mi opinión, creo que no puede haber un sistema que sea igualitario y democrático. Para muestra basta un botón: los procesos electorales que se llevan a cabo. Todo depende de cómo se desarrollen las dos crisis subordinadas, es decir, la crisis de los movimientos y la crisis en las ciencias.

El sistema mundial presente, la economía mundial capitalista mundial, podría transformarse en otra cosa, bien adoptando la forma de otro sistema mundial o de una multiplicidad de sistemas distintos que no sean igualitarios ni democráticos. El sistema resultante podría ser todavía peor que el actual.

Ante lo anterior, lo único que puedo decir es que si la situación en que la vivimos está convirtiendo a nuestra sociedad en un lugar bastante peligroso, lleno de delincuencia, desempleo, etc., que podemos esperar cuando termine (si es que esto ocurre). Una de dos: o avanzamos y mejoramos nuestra calidad de vida, o retrocedemos y quedamos como menciona el autor: el sistema resultante podría ser todavía peor que el actual.

BIBLIOGRAFÍA
Wallerstein, Immanuel. “Tipología de Crisis del Sistema Mundial”, en Geopolítica y Geocultura. Ensayos sobre el moderno sistema mundial., tr. de Eugenia Vázquez Nacarino, intr. de Immanuel Wallerstein, Edit. Kairós, Barcelona, 2007, pp. 146-170

martes, 17 de marzo de 2009

Nuche Varela Vania Lucero.
Geopolítica y Comunicación.
17 de marzo de 2009.

“TIPOLOGÍA DE CRISIS DEL SISTEMA MUNDIAL”.

En la actualidad, estamos enfrentando un periodo de crisis en el sistema mundial en todos los ámbitos de la vida humana, es decir, en lo económico, lo político y lo social. Ciertamente, estos problemas no surgieron de la nada; ha habido todo un proceso de transformación del sistema a lo largo del tiempo.

Durante toda la historia de la humanidad, se ha visto la decadencia de varios sistemas económico-políticos aplicados en su momento, y ello tiene su causa en el hecho de la evolución misma del sistema, donde éste ha evolucionado a tal punto de acumular grandes contradicciones las cuales no permiten solucionar los conflictos internos del sistema, llevando a la desaparición del sistema histórico existente. Eso nos remite a una importante cuestión: ¿qué tipo de sistema histórico implementar?

La creación o construcción de un nuevo sistema mundial recae en la situación presente de la sociedad, pues es lógico pensar que cada sociedad busca las mejoras al sistema, aspira a que los problemas se resuelvan y las personas tengan mejores oportunidades en la vida. Así, aparece el tema de la división del trabajo, que a su vez se basa en una sucesión de procesos de producción, “supuestamente” coherentes con un marco político.

Por supuesto debe aclararse que la duración de los sistemas históricos es variable, precisamente por el ya mencionado engrandecimiento de contradicciones. Éstas indican la existencia de presiones culturales, ocasionadas por la discrepancia entre los intereses de los grupos sociales, razón que los mueve en direcciones contrarias. Se piensa que las contradicciones pueden y deben ser eliminadas -o si no al menos controladas- por el sistema; de ello depende la permanencia de éste. Sin embargo, la supervivencia de los sistemas históricos se encuentra amenazada, puesto que las contradicciones son inevitables.

Cuando llega el punto en el que las contradicciones sobrepasan el nivel de capacidad del sistema, se dice que éste ha entrado propiamente en un proceso de crisis. Significa entonces la necesidad de hacer cambios dentro del sistema, modificaciones que contribuyen a la transformación estructural del mismo, conduciendo a su desintegración. De este modo, la crisis se manifiesta como un proceso de transición sistémica. Empero, el hecho de una transición no indica expresamente un avance; hay ocasiones donde la situación es totalmente contraria y la fase posterior es aún peor que la anterior, es sin duda una etapa de retroceso.

Nuestro sistema actual, economía capitalista mundial, ha sido el único existente en todo el mundo de manera simultánea. Claro, este alcance lo obtuvo progresivamente. Esta omnipresencia del capitalismo es una de las distintas causas de su crisis posterior.

Volviendo a la temática de las contradicciones, es posible vislumbrar dos principales: en la economía y en la política. En cuanto al sector económico, la problemática se centra en el papel cambiante del acumulador del capital: primero, establece una competencia con el resto de los acumuladores de capital, quienes se convierten en sus rivales acérrimos. Luego, tiene que ceder para poder continuar en el renglón de la productividad, desarrollando lazos de cooperación con los otros acumuladores; por último, esta obligación cooperativa demanda la libertad de los factores de producción, y dado que en el sistema capitalista éstos sólo pueden tener una libertad parcial para una mayor obtención de beneficios, a largo plazo el sistema se debilita.

Nos introducimos por tanto, en la política. Ésta se ve afectada por las diversas soluciones económicas implantadas -de corto y mediano plazo- que traen consecuencias políticas. Ello puede verse en la aparición de movimientos antisistémicos, conformados por los estratos oprimidos con el fin de regular las cosas a su favor y obtener mayores beneficios. Incluso, han surgido nuevos movimientos que cuestionan a los antiguos (las “nuevas” izquierdas contra las “viejas”) por su apático proceder ante el gobierno y su consecuente sumisión a éste. El fundamento de todos estos movimientos es la obtención del poder del Estado para así conseguir un verdadero cambio. La consecuencia obvia es una confusión ideológica dirigida al replanteamiento de la estrategia primordial y averiguar si ésta se basa esencialmente en la adquisición del poder del Estado.

Asimismo, las ciencias toman también cierto grado de relevancia para la evolución o declive del sistema. Los científicos sociales se han dedicado a estudiar la realidad social; con el tiempo, este análisis de la realidad, se ha tornado más objetivo, fuera de concepciones burguesas o del establishment para lograr la explicación más correcta y adecuada de la realidad y facilitar la orientación hacia la aceleración de la transformación social del mundo.

En conclusión, el sistema capitalista mundial está derrumbándose y la respuesta a la cuestión de qué camino seguir y cuál es el nuevo sistema que habremos de efectuar, tiene su base en la resolución de las otras crisis, la de los movimientos y la de las ciencias. En la medida en cómo demos solución a estos conflictos, se verá el desarrollo de un nuevo sistema mundial y de eso dependerá totalmente el porvenir de la humanidad.

BIBLIOGRAFÍA:
* WALLERSTEIN, Immanuel. Geopolítica y Geocultura. 1ra. Edición, Barcelona, Editorial Kairós, 2007. 336 PP.

lunes, 16 de marzo de 2009


López Rodríguez Yuliana Ivette
Geopolítica y Comunicación
Capitulo 7

EL INFORME BRANT

Ø Forma parte de una prueba del liberalismo ilustrado.
Ø Habla de las obligaciones morales, así como de sus valores en el mundo.
Ø También de un progreso global, a su vez demanda los objetivos de equidad y justicia.
Ø Anhela que en el universo se termine el caos y se rescate el orden.
Ø No pretende que la comunidad se base en el contrato ni en el estatus, en la aprobación y en la imposición.

No estimula a construir un compromiso mundial, porque para que el impulso tenga significado, la vigilancia no debe centrarse en las maquinas, sino en las personas.
Sustenta que lo necesario para las naciones y/o gente necesitada es en igual proporción que para aquellas que disfrutan de una mejor situación económica.

Hace un análisis detallado de las cuestiones del progreso universal, “que se han analizado y debatido durante los pasados treinta años”[1], pero en cada argumento, la comisión falla a favor de la reforma, del liberalismo global, pero la Comisión le permite transformaciones autoritarias, pero la materia siempre termina en lo mismo.

E l informe está dirigido a toda la tierra, se le pide a la Unión Soviética que señale también complicarse en el juicio de reestructuración, puesto que es una de las grandes protagonistas del control armamentístico que forma parte del Norte en las negociaciones Norte-Sur, aunque cabe mencionar, que las reformas principales que propone el informe depende del apoyo soviético.

El informe está encaminado para la opinión pública del Norte occidental, y expone a los líderes del sur que: “También debería advertir la importancia de que la opinión pública del Norte se convenza de que las medidas de reforma internacional que requieren apoyo efectuaran a las condiciones de vida de la totalidad de sus gentes”.[2]

La comisión expone que: Sus proposiciones son de naturalidad reformista y formula que la ilusión para los ciudadanos tanto del norte como los del Sur, se permanezca.
El informe hace un llamado a los liberales para que lleven a cabo las reformas a favor de la equidad, la justicia y la prevención de males mayores.

La economía mundial capitalista históricamente no ha resultado provechosa para las localidades, y el hecho de que algunas de esas zonas necesiten hoy en día una reestructuración para convertirse en “países de industrialización reciente”, no consigue mayores privilegios, pues no ha cambiado la guía de ventaja comparativa de la economía mundial.

Al tratarse de un informe hecho por una Comisión de figuras políticas, no es posible que el peso político no sea el pertinente, porque, “No aparece por ninguna parte un indicio de que el mundo este pasando por una realineación de analizas en el Norte que,… impide desde un punto de vista político la realización de las reformas propuestas por la comisión”[3]

Tampoco figura en modo alguno en este informe la existencia de amplios movimientos sociales de carácter socialista o nacionalista que han servido de motor de muchos acontecimientos de los últimos treinta años, y Immanuel Wallerstein expone que le parece “un pronóstico político muy pobre”[4], porque dicho informe funciona como un recado a Occidente, pues éste, tiene una ideología “antisistémica” que se ha ido extendiendo.

Por medio de la descomposición a causa de la revolución, entonces el único evento posible para la resistencia radica en la instauración de un orden mundial socialista, así los pactos ente el Norte y el Sur sólo obtendrá un resultado minúsculo a la hora de conseguir un orden mundial.




BIBLÍOGRAFÍA:

Immanuel Wallerstein, Geopolitica y Geocultura. Ensayos sobre el moderno sistema mundial., Kairós, Barcelona, 2007. Pág. 139 – 145.
[1] Immanuel Wallerstein, Geopolitica y Geocultura. Ensayos sobre el moderno sistema mundial., Kairós, Barcelona, 2007. Pág. 140
[2] Immanuel Wallerstein, Geopolitica y Geocultura. Ensayos sobre el moderno sistema mundial., Kairós, Barcelona, 2007. Pág. 141
[3] Ibíd. Pág. 144
[4] Ibíd. Pág. 145

domingo, 15 de marzo de 2009

caPiTuLo 8 "TiPoLoGiA de CriSiS dEL sIsTeMa mUndIaL"


Karla Aguirre Loredo
Geopolitica y Comunicación
Fecha: 17 de marzo de 2009


CAPITULO VIII “TIPOLOGÍA DE CRISIS DEL SISTEMA MUNDIAL”
El autor presenta en este breve ensayo, información realmente importante, ya que englobando la palabra crisis, la transporta a tres ángulos distintos pero que se correlacionan entre si. Estos son la crisis del sistema mundial, la crisis de los movimientos y la crisis en el ámbito de las ciencias; esto para poder llegar a un pronóstico que el mismo autor plantea.
Se mostrará en el presente trabajo, una pequeña síntesis de lo que el autor menciona en cada una de estas crisis al igual que en su pronóstico, para después realizar una conclusión de lo comprendido en este capitulo.
CRISIS DEL SISTEMA MUNDIAL
Comienza el autor diciendo que el tema de “tipología de crisis” sugiere la existencia de una multiplicidad de crisis. El argumento de su ensayo, parte de que en términos de espacio-temporales existe una única crisis, la cual, en términos estructurales, se manifiesta en tres distintas esferas de la actividad social. Hace referencia a definiciones que se han contemplado con el termino “crisis”, pero decide explicar que para él, crisis la comprende como otra cosa; la circunstancia que en un sistema histórico ha evolucionado a tal punto en que llega una acumulación que impide que se resuelvan sus propios dilemas por medio de ciertos patrones.
Para ello se plantea que con la descripción de crisis existen seis supuestos ocultos:
a. Se explica que la unidad significativa de análisis social es un sistema histórico, un proceso en curso de división social del trabajo que se organiza sobre ciertos principios fundamentales, lo que en ocasiones se denomina “modo de producción”.
b. Todo sistema histórico sigue una trayectoria: un comienzo, un desarrollo y, con el tiempo, un final. Es curioso el dato que se da en relación a que en la historia del mundo han existido grandes sistemas, que han perdurado 400 y 500 años, o incluso más.
c. Dentro de todos los sistemas históricos hay contradicciones, que hacen referencia a presiones estructurales que obligan a los grupos a moverse en dos direcciones opuestas al mismo tiempo.
d. Dado que las contracciones son inevitables, se deduce que todo sistema histórico acabará por socavar su propia capacidad de supervivencia; por ello podemos hablar de la desaparición inevitable de los sistemas históricos.
e. Cuando las contradicciones alcanzan cierto nivel de intensidad, uno puede decir que el sistema histórico entra en crisis.
f. En tanto que el declive es inevitable puesto que las citadas contradicciones son ciertas, lo que viene después de la transición queda históricamente abierto. La frase que llamo mi atención en esta parte y que es totalmente cierta es “el hombre labra su propia historia”.
Sin embargo siguiendo la idea de que el hombre es aquel que labra su propia historia y que es el, el ayuda de los sistemas el que a llevado a que se generen la crisis, el autor propone que una crisis significa necesariamente una transformación.
Pero es aquí en donde se entra en un dilema, ya que no vivimos en un sistema cualquiera, sino en uno muy completo –explica el autor-, se trata del sistema mundial moderno o económico capitalista mundial. De esto se derivan seis supuestos en función de este sistema histórico:
a. El sistema mundial moderno es una economía capitalista mundial. Se trata de una economía mundial que cuenta con numerosas limitaciones de la división social del trabajo que abarcan ámbitos culturales múltiples. Y es donde se observa un algo clave para poder comprender como funciona el capitalismo “la división del trabajo”. Se basa en el funcionamiento de una “ley de valor”. El capitalismo es el primer sistema que ha permitido que el modo de producción capitalista se despliegue por completo y desarrolle todo su potencial.
b. Este sistema nació en el siglo XVI, fundamentalmente el Europa, mediante una serie de procesos intensos logró su expansión a finales del siglo XIX y logró con esto incorporar todas las zonas geográficas del planeta a su división social del trabajo
c. Las contradicciones que este sistema encierra son múltiples complejas. Destacan entre ellas dos más importantes, la esfera económica con el papel de la acumulación del capital y la esfera política hacia la creación de una mayor demanda y la cooperación con empresarios.
d. Contradicción, el acumulador de capital a medio plazo. La acumulación del capital de manera ilimitada.
e. Desde la Primer Guerra Mundial y la Revolución Rusa, y con la gran aceleración posterior a 1945, se han aunado la situación para crear lo que hoy se conoce como crisis del sistema mundial capital.
f. El autor sugiere que con todo lo anterior nos dirigimos todos como sociedad, hacia un nuevo orden mundial socialista. Dado que el sistema capitalista ha entrado en un declive.
CRISIS DE LOS MOVIMIENTOS
Esta crisis se trata de un aspecto estructural, no moral; se explicación fundamental no reside en sus incumplimientos, sino en presiones objetivas. Los movimientos comenzaron a organizarse en el siglo XIX, con estrategias políticas como la adquisición del poder del Estado. Además a partir de 1945 lo movimientos antisistémicos han cosechado un éxito notable en su objetivo decimonónico de alcanzar dicho poder.
CRISIS EN EL AMBITO DE LAS CIENCIAS
La ciencia, tal y como la hemos conocido, es la expresión intelectual por excelencia de la modernidad. Parece sostenerse sobre tres premisas fundamentales. La primera es que todo lo que forma parte del mundo real es cognoscible. La segunda consiste en que cuanto mas amplia es una generalización, mejor es, y que en ultima instancia todas las generalizaciones relevantes pueden plantearse en términos de leyes universales. La tercera premisa s que la única manera en que uno puede conocer de veras al mundo real es a través de la ciencia, de ello se infiere que el único modo en que uno puede “manipular” conscientemente el mundo real es a través de la ciencia.
Hay dos aspectos que debemos de apuntar acerca de la aparición de lo que denomino ciencias sociales históricas. En buena medida eran la expresión continuada de la Revolución Francesa como fenómeno histórico mundial. También compartían la ambigüedad fundamental de la Revolución Francesa en su condición de fenómeno que se produce como una evolución natural dentro del marco de la economía capitalista mundial, pero también como el foco del primer movimiento antisistémico serio de la historia del capitalismo moderno.
PRONOSTICO
El autor plantea en esta parte aspectos en los que yo en lo personal estoy muy de acuerdo, ya que expone primeramente que debe de a haber un “Progreso”, una transformación social que nos permita crear un orden mundial socialista que sea tan igualitario como democrático. De hecho apunta que par que se pueda logra ese orden es necesario de que se resuelvan las dos crisis que plantea él, la de los movimientos y las ciencias.
Y posiblemente si se llega a transformar el sistema actual el nuevo sea peor, ya que se realiza una breve recopilación de que este problema ya ha ocurrido con anterioridad cuando se produjo la transición (en Europa) del feudalismo al capitalismo, que no sólo no supuso un progreso, sino que en muchos sentidos se tradujo en un rotundo retroceso. Y se explica que los defensores del privilegio durante el periodo de transición pueden hacerse con el control de las palancas del cambio, no para evitarlo, sino para dirigir el cambio en la dirección de otro sistema que, aunque muy distinto en sus formas de actual, instalara el privilegio de igual modo. Yo lo sintetizo así, “La búsqueda por la conservación de sus intereses”.
De hecho como termina su ensayo el autor se me hace bastante interesante ya que apunta a que la cuestión no estriba entre crisis mundial o transformación mundial, sino en que clase de transformación social somos capaces de llevar a cabo y de qué modo se resolverá la crisis.
Y es precisamente la solución, para tratar de salir de este sistema económico o mejorarlo de cierta forma aunque no creo que tenga solución, (a llegado a un limite) será la buena organización social para permitir dicha transformación. Además a lo largo del capitulo. El autor nos presento información e interpretaciones muy valiosas que nos permiten observar por que la situación actual esta como esta. De donde es que viene “la tipología de crisis del sistema mundial”.
Considero que el mayor aporte que realiza el autor desde mi perspectiva es el hecho que se comentaba en clase; como analiza “la división del trabajo”, dentro del sistema capitalista. Y es que dentro de cada sociedad tiene que haber una división del trabajo para que dicha sociedad pueda avanzar, acepto eso pero mi cuestión seria ¿hasta que extremos se ha llevado dicha división del trabajo?
Además las predicciones que realiza el autor a cerca de las crisis económicas son muy ciertas, él predice que para el año 2035 habrá una crisis muy grande que va a ser una crisis de “largo plazo”, producida por una serie de pequeñas crisis de “corto plazo” y como está la situación, se observa que el autor tenia razón, la crisis que esta viviendo Estados Unidos, apunta a ser cierta la predicción, pero nosotros la observamos muy fuerte, pero según esto sólo corresponde a ser una crisis de corto plazo, entonces la pregunta seria ¿Qué nos espera para el año 2035? ¿De que magnitud será la gran crisis? Estas son tal vez cuestiones en las que sólo podremos predecir y acercarnos a la realidad pero no decirla con exactitud.



BIBLIOGRAFIA:
ü Wallerstein, Immanuel. Traducción de Vázquez Nacarino, Eugenia.
“Geopolítica y Geocultura, ensayos sobre el moderno sistema mundial”
Editorial Kairós
Barcelona, Febrero del 2007
336 pp.

CaPiTuLo 6 "MaRxIsMo-LeNismO"


Karla Aguirre Loredo
Geopolitica y Comunicación


CAPITULO VI. MARX, MARXISMO-LENISMO Y EXPERIENCIAS SOCIALISTAS EN EL SISTEMA MUNDIAL MODERNO
Resulta bastante interesante lo que nos presenta el autor en este capitulo, cuyo contexto es muy especifico. Se mencionan ideas que nos van llevando a comprender tanto la condición que pasaba Rusia, así como la manera en que Marx y Lenin cruzaron sus caminos con el socialismo.
A continuación presento todos los puntos que considero sobresalientes del capitulo para después dar una pequeña critica sobre el tema, “socialismo”.
§ Marx y sus ideas están floreciendo, tiene hoy mayor vigencia que las de cualquier otro analista del siglo XIX y prometen seguir siendo imprescindibles para la vida social del sistema mundial en el siglo XXI. En el marxismo-leninismo como estrategia y como ideología ha desempeñado su papal en la historia y ha pasado a ser un asunto menor para la actual economía política global.
§ Se dice que el leninismo o bolchevismo adquirió entidad organizativa en 1902, con el contraproyecto que Lenin presentó al texto de Plejanov ante el II Congreso del Partido Socialdemócrata Ruso, celebrado en el verano de 1903; el congreso tuvo como resultado la división del partido.
§ Hoy en día la historia de los movimientos socialistas del mundo se suele simplificar en la división de la historia entre dos tendencias: reforma y revolución.
§ Los partidos de la Segunda Internacional alcanzaron el poder en una serie de países, promulgaron el llamado Estado de bienestar.
§ Lenin sostenía que la única manera de que la clase obrera llagase al poder era a través de la revolución, esto es, de la insurrección. Entendía que se trataba de luchas político-militares.
§ Las insurrecciones solamente tuvieron éxito en unos pocos países. Incluso en el caso de Rusia solo puede describirse de forma parcial, de hecho el país mas próximo al escenario descrito por Lenin resultó ser China, donde verdaderamente un partido fomentado por cuadros disciplinados organizó una larga lucha político-militar y al final se hizo con el poder, que culminaría en la instauración de una dictadura del proletariado.
§ Rusia era un país en el que la tecnología estaba atrasada en relación con Europa occidental y Norteamérica, ni siquiera contaba con un sistema parlamentario.
§ La Revolución Rusa de 1917 causó sorpresa porque se pensaba que el primer país en ser socialista seria Alemania.
§ En 1914, Rusia era un país europeo, una gran potencia militar y tenia con un sector industrial relevante. Sin embargo, como país industrial era a todas luces el mas débil de todos los estados europeos.
§ Alemania e Italia podrían haberse convertido en un factor determinante y, en consecuencia, claro, estos devinieron los dos focos principales de los movimientos fascistas en el periodo de entreguerras.
§ El marxismo-leninismo se reveló como la ideología eficaz para abonar la actividad antisistémica en la semiperiferia a comienzos del siglo XIX.
§ A resueltas de la Guerra Civil y la intervención extranjera, Rusia era un país devastado cuya solidez económica, para empezar, distaba mucho de estar afianzada.
§ Rusia era un imperio y no una nación-estado.
§ El eslogan de Lenin según el cual “el comunismo no es otra cosa que soviets mas electricidad”.
§ El estalinismo contó también con la ayuda de la Geopolitica. En el periodo de 1933-1941 se dio la situación de que tanto Alemania como el trío occidental (Estados Unidos, Reino Unidos y Francia) maniobraban para hallar algún modo de aniquilar al Estado soviético.
§ El estalinismo le brindaba a Estados Unidos una justificación ideológica y una consolidación de su hegemonía en el sistema mundial.
§ El periodo de la enorme expansión de la economía capitalista mundial, entre 1945 y 1967.
§ En la década de 1950s la idea de la Unión Soviética como modelo de desarrollo económico se había generalizado, si bien es cierto que nunca fue universal.
§ Cuando la economía mundial empeoró, los procesos económicos de los países socialistas no se diferenciaron mucho de los del Tercer Mundo. Se vieron en serios aprietos al intentar vende sus productos en el mercado mundial, al tratar de ser “competitivos”; sufrieron presiones inflacionistas y un descenso en el nivel de vida.
§ La creciente apertura al mercado por parte de los países socialistas en el mejor de los casos solo ha mitigado ligeramente sus dificultades económicas.
Considero que en el mundo siempre hay interese que se juegan y en el caso de Rusia le toco vivir como dice el autor, los intereses de Estados Unidos, que en ese momento le convenía el estalinismo ya que le brindaba una justificación ideológica y una consolidación de su hegemonía en el sistema mundial, y recordando en temas anteriores llego a ser muy pero muy importante esta fase.
La lucha que vivió el país Ruso se vio totalmente afectada por una serie de ideologías que jugaron un papel muy importante, se encontraba por una lado la de los obreros y/o campesinos, la del trío occidental conformado por Estados Unidos, Reino Unidos y Francia, que lograban maniobraban para hallar algún modo de aniquilar al Estado soviético. Y por ultimo la parte de Lenin, que desea firmemente que la clase obrera llegase al poder.
Estas situaciones no cambian siempre hay quienes están arriba y mandan o subordinan a los demás y por nada del mundo los dejan estar a su nivel.

BIBLIOGRAFIA:
ü Wallerstein, Immanuel. Traducción de Vázquez Nacarino, Eugenia.
“Geopolítica y Geocultura, ensayos sobre el moderno sistema mundial”
Editorial Kairós
Barcelona, Febrero del 2007
336 pp.